Juegos De Guerra [3]

Capítulo 3: "Alfein, El Arquero Mágico"

El casco del gigante destilaba unos hilillos de humo rojo. Jurgen cerró los ojos y bajó su espada para entregarse a la muerte. Fué un momento de paz, eran los últimos momentos de vida de Jurgen y parecía que pudiese ver los espiritus de sus compañeros a un costado del campo de batalla dandole la mano para que se uniera a ellos.

"Si debo morir lo haré con honor" Fué el último pensamiento de Jurgen y con su último aliento gritó para que los oscuros lo escuharán antes de ser destrozado por el gigante de hierro:

-¡LARGA VIDA AL REY Y LA REINA DE ESTE IMPERIO!

Jurgen estaba conmocionado, su corazón aún latía rápidamente, sus heridas seguían ardiendo y su pecho se expandía y contraía con agitación. ¿Esto era la muerte? Creía haber caido al infierno y que su condena era vivir su muerte una y otra vez.

Cuando Jurgen abrió los ojos para contemplar el infierno, aún se encontraba en el campo de batalla tirado en el suelo y levantando su espada para protegerse del ataque que se avecinaba. Bajando un poco su dañada espada encontró al gigante de hierro aún con el hacha levantada sobre él; pero esta vez había algo diferente, El gigante parecía estar congelado y el leve temblor de su armadura hacia notar el esfuerzo que trataba de hacer para seguir moviendo el hacha.

Como si tiraran de unas cadenas, el gigante de hierro fue obligado a bajar su hacha. Jurgen aún no lo podía creer, estaba vivo y empezó a levantarse para escapar cuando de repente un grito afilado lo asaltó desde atrás.

-¡Agachate Jurgen!

Jurgen buscó el origen del grito y se encontró con Alfeín de ojos destellantes en color verde y con una gigantesca flecha encantada brillando en rojo y naranja sobre su arco.

-¡Muévete! no podré controlarlo mucho tiempo

El espadachín vió como se intensificó el brillo de los ojos de Alfein en un intento por no liberar al gigante mientras tensaba su arco lentamente. Jurgen se tiró al suelo esperando no ser destruido por la famosa flecha explosiva de Alfein.

Una gran explosión se escuchó y los pedazos de metal volaron por todas partes hiriendo algunos aliados y enemigos. Jurgen estaba paralizado por la onda expansiva y sentía que su brazo se quemaba...estaba en llamas.

Continuará...